El mundo parece estar cada vez más dividido entre “nosotros y ellos” y los problemas que giran en torno a comportamientos que nos hacen cuestionar qué es moral, inmoral o amoral. Parece haber una guerra entre la bondad y la crueldad y entre la mentira y la verdad. Muchos abogan por que el amor triunfe sobre el odio, pero puede ser un desafío apagar todo el ruido, concentrarse en lo que va bien y gastar energía en lo que puedes controlar.
Hay un dicho que dice que “si quieres saber cómo sopla el viento, mira la arena”. Si tu cuerpo fuera la arena, ¿qué notarías? Dolores de cabeza, dolor de espalda, tensión en el cuello, ¿qué te dice tu cuerpo? Si el viento representa tu mente y tus pensamientos, ¿qué sopla este viento metafórico a tu alrededor? ¿Estrés? ¿Fatiga? ¿Ansiedad?
La meditación puede ayudarte a volver a centrar y fortalecer tus recursos emocionales y mentales para doblegarse con el viento, en lugar de luchar contra él. No solo eso, sino que la mediación puede ralentizar el proceso de envejecimiento. También puede apoyar una vida más saludable y prolongada.
